Defendiendo a mi generación...

Parece que fue anteayer cuando se dio la marcha de #yosoy132 y muchos de los que nacimos entre 1970 y 1990 aplaudieron la lucha de las nuevas generaciones de estudiantes. "Lo que nosotros no pudimos ellos lo están logrando" "lo que nosotros no hicimos la nueva generación si tiene el deseo de lucha" " ya que nosotros no logramos hacer porque estábamos desorganizados esta nueva generación si logrará el cambio".... y me puedo seguir con esta lista de términos y peroratas sobre la marcha de los estudiantes convocados por las escuelas particulares. 

Ahora es el momento de rebatir estos comentarios de muchos de mi generación. Los que nacimos entre 1970 y 1990 somos una generación muy plural en muchos aspectos. De entrada nos tocó a muchos ser los hijos de esos estudiantes de la generación del 68, quienes - después del conflicto de Tlatelolco - vivieron con miedo a la insurrección. Somos los hijos de gente que terminó frenando sus ideales para que sus hijos no sufrieran la misma suerte de sus compañeros de lucha. También somos los nietos de la generación que entre 1930 y 1950 vivió la etapa de la posguerra, y que vio en sus hijos, esos de la generación de 1968 con miedo por los cambios vertiginosos que se dieron en la misma. No podemos descartar que nosotros somos la generación que se vio refrenada desde muchos de los antecesores para que nos alineáramos por la derecha y no siguiéramos el camino peligroso de la izquierda. Somos una generación que hemos vivido bajos los estigmas sociales del corporativismo y de un Estado decadente caracterizada porque no nos hemos pronunciado contra el gobierno... pues que creen ¡que están muy equivocados!

Nuestra generación tuvo la suerte de surgir en un momento fuerte de transición en todos los aspectos. Nos tocó emprender un camino dentro de muchos parámetros contrarios a nosotros. Cuando iniciábamos nuestra vida sexual, también vivíamos el surgimiento del virus de finales del siglo XX, el VIH, donde todos los que fuéramos infectados seríamos estigmatizados, en un primer lugar por ser o prostituta o por ser homosexual y, durante la década de 1990, al descubrir que cualquiera se podía infectar, entonces nos estigmatizábamos entre nosotros por ser "Sidoso". Frente a la generación anterior, donde el amor era libre y sin trabas, nosotros empezamos a vivir una relación entre nosotros, nuestra pareja sexual (cualesquiera que fuera) y un condón. Esto obliga a que volteáramos a una protección individual. 

Nuestra generación también tuvo la suerte de surgir en el momento de que el temblor de 1985 marcó una coyuntura social fuerte donde se dió un cambio brutal en lo que significaba seguridad. En todos aspectos, vivimos una transición de vivir en paz hacia un sentimiento de inseguridad, puesto que "surgieron" de las "ciudades perdidas colapsadas" nuevas viviendas que se mudaron hacia muchas partes del DF. el sacar del Centro Histórico a muchas personas que vivían del vandalismo y del agandalle al otro, y mandarlas a las distintas delegaciones políticas inició una cadena de inseguridad. Antes no había problema de salir a las tres de la mañana, cuando en 1993 empecé a salir a los antros, también se inició una política de seguridad... "Guarda tu dinero en los calcetines" "no te muestres como niño bien", "no lleves oro o cualquier cosa para que te roben", y poco a poco se fue dando algo nuevo, la tecnología al servicio de la sociedad. Que en 1998 alguien tuviera un celular lo mostraba como un "riquillo" y "cliente seguro de los ladrones". Teníamos que colocarnos muchas veces en las cabinas telefónicas para hablar por celular para evitar las miradas de los "amantes de lo ajeno".

Nuestra generación, fue la que sufrió también un ataque desde las mismas universidades Privadas en relación al trabajo. "Contador Público (no IPN ni UNAM)" "Abogado (NO UNAM)" "Médico (NO IPN ni UNAM)" y así... emprendiendo la lucha por la educación pública y la privada. La idea de privatizar la educación nos tocó a nosotros y no a la nueva generación. Nuestra lucha logró que las universidades públicas y privadas compitan por un mismo puesto ya de una forma un poco más democrática y no discriminatoria.

Nuestra generación luchó por el respeto a la diversidad sexual, en 1994 que esperanzas de ser joto, marica, lesbiana, marota, (anexe su mote preferido) e ir de la mano con nuestra pareja, que esperanzas de caminar con la persona que ama uno y no ser atacado. ¿Cuantos ataques homofóbicos hubo? no tengo idea pero fueron bastantes. Las marchas LGBTTTI apenas eran "Marcha Gay" en 1990, Marcha "Lesbico-Gay" en1994 y la primer "Marcha LGBT" como tal se estaba dando como para el 2000. Para la XXX Marcha, en 2008 los heterosexuales también marcharon como parte de la Diversidad Sexual. La lucha por los derechos sexuales nos tocó a nosotros como la continuidad de la generación del 68 pero (de nuevo) de forma responsable.

Así mismo nos tocó a nosotros la lucha por los derechos de los indígenas, ¿acaso olvidan las marchas pro-zapatistas? "Marcos somos todos, todos somos Marcos", la denuncia de muchos de nosotros que iniciábamos en 1994 la vida electoral para que el proceso fuera limpio se empieza a vislumbrar en esta generación. La coyuntura del cambio en el 2000 no se entiende sin esta generación de los 1970's quienes buscamos un nuevo camino también, buscando quitar al PRI del poder... que el PAN también encontrara sus trucos es otra cosa.

Señores de mi generación, estoy de acuerdo que los estudiantes han logrado muchas cosas y que la marcha #yosoy132 es el resultado de un camino largo y fuerte en busqueda de la democracia. Pero no podemos darles la palmada a ellos sólamente ya que nuestra generación tuvo mucho que ver para que esto se de. Somos una generación de transición que seguimos en lucha y somos pujantes. Ahora el chiste es mantenernos juntos con los de la generación del 68 y los del 2012 y entre todos sacar este país en un rumbo común. El de ser mejores entre todos.

Luchemos en conjunto y logremos entre todos este cambio tan anhelado.

Lalo.

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